En la colección Oh!rigami de Isabel Zapardiez la diseñadora deja patente su amor por la cultura nipona. En ella, vuelve a sus orígenes profesionales y a los mundos que le apasionan. La chispa de su inspiración se enciende en la visita que la diseñadora realiza a Japón, en el reencuentro con su rico universo cultural y estético, muy presente en toda su trayectoria. Desde esta experiencia personal, realiza una interpretación libre sobre el Japón ancestral y el Japón moderno… siempre desde la emoción y las sensaciones, la materia donde se enmarca su trabajo. Emoción que nos ha transmitido en su desfile.
En su apuesta para una novia cosmopolita y elegante, la diseñadora ha querido transmitir su amor por la exquisitez y la exclusividad de sus diseños siempre haciéndole un guiño a la cultura japonesa, representado por la pieza más característica de Japón, el kimono. En Oh!rigami se combinan con frescura distintos estilos, prendas y volúmenes como los monos, las faldas pantalón, las faldas con volúmenes etéreos y los largos midi. Son también recurrentes los escotes en la espalda y las mangas elaboradas y con volumen. Y para enmarcar la figura, los cinturones Obi en cuero que modelan las prendas.
Como novedad, los paraguas protagonizan el look nupcial convirtiéndose en icono de moda, símbolo de perfección y un guiño al la climatología de su tierra. Isabel Zapardíez crea así su primera colección de paraguas, en colaboración con la marca guipuzcoana Ezpeleta, junto con una nueva colección de zapatos y nuevos modelos de bolsos.
En Oh!rigami, Isabel Zapardiez apuesta por tejidos como el gazar, el papel de seda y el neopreno que combinan a la perfección con materiales y acabados exquisitos como los bordados en satén, los brocados, las gasas, las plumas y las pedrerías sobre tul. En cuanto a los colores, la diseñadora ha escogido para esta colección el coral en sus distintas gamas presentando vestidos que van desde el salmón más suave al granate más intenso. El beige combinado con el blanco se convierte en un dorado único que envuelve los brocados en algunos de los diseños de la colección.
Una año más, la diseñadora vasca que ha convertido su nombre en un sello comercial de diseño exclusivo y único, nos ha sorprendido por su apuesta arriesgada y llena de matices en la que su trabajo artesanal ha quedado más que patente y en donde la elegancia brilla siempre como en cada una de sus colecciones. Enhorabuena por transportarnos como cada año a un universo mágico donde no dejamos de soñar...
Fotos cortesía de Barcelona Bridal Fashion Week
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